Creo firmemente en el señor mi Dios.

Creo Señor, firmemente todos y cada uno de los misterios de nuestra religión, y todo aquello que nuestra Madre la Iglesia nos manda creer y confesar.
Espero en tu bondad infinita que me perdonarás mis muchos pecados y me darás la vida eterna.
Te amo.
Señor y dueño mío por ser infinitamente bueno y digno de todo amor.
“Soy digno de todo amor".
Síguenos